El pasado mes de junio falleció Juan José Fernández, “Juanchi”, notorio wing derecho que jugó – entre otros- en Ferro, 9 de Julio y en Deportivo Morón, en la primera B Metropolitana. En su historial está el haber convertido un gol ante un grande como Huracán el 24 de octubre de 1974.

Por Edgardo Peretti

Archivo LA OPINION

 

El documento.- La cobertura del Diario de aquella jornada que marcó un tiempo para el fútbol local.

La noticia fue tan dura como de tardío conocimiento para quien esto escribe. En la ciudad de Santa Fe fallecía el 16 de junio pasado Juan José “Juanchi” Fernández, quien residía desde hacía muchos años en Esperanza y era asistido tras padecer un terrible accidente carretero. Tenía 65 años.

Un tipo simple, de barrio, que jugó en la primera de nuestro Ferro, que pasó por 9 de Julio, allá por la década del setenta, y que tuvo destacada actuación en el Deportivo Morón, cuando el fútbol metropolitano era aún una quimera para nuestros jugadores. En ese mismo club brillaría contemporáneamente Hugo Riberi y luego, en los ochenta Juan Carlos Micheli, o sea “Pepitito”.

Pero el momento de gloria de “Juanchi” fue el 24 de octubre de 1974 cuando se presentó en primer equipo de Huracán de Parque Patricios en la ciudad, día de su fiesta Patronal. El partido se organizó en forma conjunta entre los clubs 9 de Julio y Peñarol, con especial intervención de los del Villa Rosas y personalidades como “Puchin” Negro y sus hermanos y la participación activa de notorios hinchas del “Globito” como Norberto “Ruso” Frenquelli y Domingo Gallardo.

El encuentro se jugó en la cancha del “9” (que por entonces tenía una sola tribuna, la vieja, de cemento, sobre el lado oeste), por lo  que se decidió agregar  tres hileras de sillas en el sector interno, todo alrededor del campo de juego, arribándose a un lleno completo el día del cotejo.

Huracán era la sensación del momento. El mejor equipo de fútbol argentino, con César Luis Menotti como DT, quien había debutado el 12 de octubre frente a España, en el Monumental (empate 1 a 1, con gol de Roberto Rogel para la albiceleste), y con grandes jugadores en su plantel.

Todo estaba anunciado y preparado, pero Huracán, quien solamente había adelantado la ausencia de Alfio Basile, llegó con muchos suplentes, faltando a la cita hombres de la talla de Carlos Babington, René Houseman, Francisco Russo, Rubén Suñé, Jorge Carrascosa, Omar Larrosa y Alberto Fanessi. Para completar el “faltazo”, como técnico llegó Rogelio Poncini.

Sin embargo, estuvo Miguel Angel Brindisi, un gran jugador, que se brindó a pleno por el partido y  se llevó el aplauso de la gente que lo reconoció por su entrega y calidad, en la cancha y como persona Quien esto escribe aún lo recuerda saludando a chicos y grandes, y respondiendo a cada palabra o gesto. Un grande Miguel.

Quizás esta falta de potencial (que no era tal, ya que Huracán era un  equipo profesional de primera división) y la calidad y garra de los rafaelinos, el partido fue parejo y luchado y se definió para los visitantes a los 44 minutos del segundo tiempo.

Como dijimos, el cotejo se jugó en cancha de 9 de Julio, el árbitro fue José “Pino” Lazarte, se recaudaron $ 6.266.500 moneda nacional (costo del Diario referencial de esa fecha 180 pesos m/n, 1,80 pesos ley 18188) y hubo preliminares de sexta y octava entre el “9” y Peñarol.

Los equipos formaron de la siguiente  manera:

COMBINADO RAFAELINO:  Próspero Juan Santiago (Jorge Bolcatto); Vico (Martínez), Julio Heinicke (Genaro Cerutti), Illescas (Funes) y Benavídez; Horacio Barbagallo (Rodríguez), González y Distéfano, Juanchi Fernández, Botta (Navone) y Hugo Riberi (Gómez). DT: Domingo Gallardo.

HURACAN: Leyes (Roganti); Dante Roma, Longo, Herrera (Díaz) y Lavoratto; Miguel Brindisi, Ríos y Quiroga; Candedo (Rico), Roque Avallay (Hallar)  y Roberto Artemio Gramajo (Tello). DT. Rogelio Poncini.

Debe destacarse que Huracán utilizó su clásica camiseta blanca, en tanto el combinado jugó el primer tiempo con la de 9 de Julio y el segundo con la de Peñarol.

La crónica de LA OPINION destaca lo parejo del cotejo y aunque hubo en el tiro en el palo de Brindisi, no se sacaron ventajas. En el segundo tiempo Rafaela sacó diferencia cuando “González combinó con Distéfano, quien alargó para Fernández, quien aguantó la marca de Lavoratto y sacó un remate fuerte que venció a Roganti”, según se consigna.

Iban 27 minutos del segundo tiempo. El empate llegaría a los 33 cuando Quiroga metió un tiro libre en el ángulo del inolvidable “Tordo” Bolcatto, sobre el arco de la calle Pellegrini. A los 44, otro soberbio zurdazo de quien era el suplente de Babington marcó la distancia definitiva. La fiesta del fútbol sumaba otro capítulo inolvidable para los que participaron de la misma, como público, como dirigentes o jugadores, o como el querido “Juanchi” que también se metió en la historia en esa tarde de primavera.

Adonde estés, querido amigo,  gracias por la evocación y que viva el fútbol!

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